Músicos: Lizz Wright (voz), Jay Bellerose (batería, percusión), David Piltch (contrabajo), Chris Bruce (guitarras), Marvin Sewell (guitarras), Kenny Banks (piano, órgano Hammond), Patrick Warren (teclados), Marc Ribot (guitarra eláctrica), Valorie Mack, Cathy Rollins, Artia Lockett, Angela Jenifer, Sheree-Monique, K. Heshima White, Ted Jenifer, Kevin O’Hara (coros), Kenny Banks, Sr. (director coro) Discográfica: Concord Records Distribuidora: Universal Año: 2017 Estilo: Jazz vocal |
Si hay algo que me ha llamado la atención siempre en esto de las músicas negras norteamericanas ha sido la devoción que los artistas negros han sentido, y sienten, por su patria chica, por así decir, como son los estados del sur, donde han sufrido, y en buena medida siguen sufriendo, racismos de todo tipo clase y condición. Pero igual es aquello que cantaban unos racistas y de los que se trata es de “Sweet home Alabama/Where the skies are so blue” y eso tira mucho, pero mucho.
Viene lo anterior a colación porque el nuevo trabajo, que hace el sexto ya de su carrera, de la cantante Lizz Wright es un regreso a sus orígenes; el profundo sur de Georgia. Y este homenaje a la tierra que la vio nacer y dar sus primeros pasos en este mundo lo hace re-interpretando nueve canciones de músicos tan diferentes como Nina Simone, Bob Dylan, K.D. Lang o Ray Charles. A estas nueve canciones hay que añadir una décima, que es la única compuesta para la ocasión por la propia cantante en unión con la compositora californiana Maia Sharp.
En este nuevo disco la profunda y grave voz de Wright se enfrenta a los estilos musicales que han configurado su vida y su carrera: el góspel (su padre es predicador y su madre era miembros de un coro de góspel), el blues y el jazz.
Los casi 44 minutos que dura el disco pasan como una exhalación, y canciones como el gospel ‘Seems i’m never tired lovin you’ que popularizó Nina Simone hacen de este cedé un verdadero disfrute. Pero tampoco hay que olvidarse del ‘Stars fell on Alabama’, donde brilla la guitarra de Marc Ribot o del dylaniano ‘Every grain of sand’.
Sí, un gran disco que confirma a Lizz Wright como una de las grandes cantantes del jazz de la actualidad.
J.M.P.R.