En este año dantesco, es decir, en este año dedicado a conmemorar el 700 aniversario de la muerte de Dante Alighieri, nosotros, aquí, en distritojazz.com, también nos vamos a unir a ésta efemérides.
Así de sentimentales somos.
Y lo vamos a hacer recomendando dos de las mejores ediciones de la Comedia (aquí la llamamos la Comedia, que es como la tituló originalmente su autor, pues lo de la ‘Divina’ es un añadido posterior, algo así como las hojas de parra que les pusieron a Adan y Eva en La Capilla Sixtina… pero no nos desviemos).
Antes de continuar una aviso a navegantes: la Comedia de Dante no es un libro que se lea con facilidad y que se entienda a la primera, se necesitan, al menos, dos lecturas para saber no tanto de qué va –en pocas palabras, un tipo (Dante) que va del infierno al cielo, siempre acompañado, primero por un poeta (Virgilio) y luego por su amor espiritual, o algo-, que eso es fácil, sino de quienes habla y qué pretende decirnos con ello –pero igual todo es muy simple y no hay más cera que la que arde.
O como se canta en el bolero «es la historia de un amor como no hay otro igual y nos hace comprender todo el bien y todo el mal».
La primera Comedia que hay que recomendar sí o sí es la que tradujo Angel Crespo y que en el año 2004 la editorial Seix Barral editó en tres tomos, correspondientes cada uno de ellos a los tres espacios-tiempos que recorre Dante: Infierno, Purgatorio, Paraíso.
Leer esta traducción no es fácil, y a veces incluso se hace ininteligible, tanto que el propio traductor tiene que explicar lo que ha traducido.
Ello se debe a que Crespo quiso mantener la fidelidad a los famosos tercetos de endecasílabos, en los que está escrita la Comedia, lo que, en su momento le acarreo la calificación de excesivamente gongorino.
O de otra manera más amable; a veces Angel Crespo (1926-1995) incurre en una falta de suavidad para mantener las rimas.
En todo caso, Angel Crespo supo conservar la desenvoltura y ferocidad del lenguaje dantesco.
Por su parte, el José María Micó (Barcelona, 1961), catedrático de literatura, poeta y músico tradujo en el año 2018 para la editorial Acantilado la obra de Dante, lo que le valió el XXII Premio de Traducción Ángel Crespo.
Lo que ha hecho Micó es mantener el espíritu de la Comedia pero con un lenguaje más cercano y asequible. Esto es, el traductor ha respetado los famosos tercetos, pero no así su rima.
Una carácter´sitica que no debe pasarse por alto de la traducción de Micó es que está muy literaturizada, de manera que la asimila a una obra de autoficción.
El propio Jose María Micó lo explicó en su momento: «Mi obsesión era que se pudiera leer como un relato; buena parte de la complejidad de la comedia procede de su lenguaje poético; al verterlo en verso rimado te obligas a un registro especial, a forzar el sentido o la sintaxis; haberlo traducido en prosa sí hubiera sido traicionarlo; creo que este formato, manteniendo la métrica y poniendo asonancias cuando me ha sido posible, equivale a lo que entendemos por poesía”.
Para entender las diferencias entre una traducción y otra valga como ejemplo el Canto VI del Infierno, en sus versos 34 a 36:
“Noi passavam su per l’ombre che adona / la greve pioggia, e ponavam le piante / sopra lor vanità che par persona”.
“Íbamos sobre aquellos que entumece / la lluvia pertinaz, los pies posados / en su ilusión, que al cuerpo se parece”. (Ángel Crespo)
“Íbamos sobre sombras abatidas / por la lluvia tenaz mientras pisábamos / su vanidad con forma de persona”. (José María Micó)
En todo caso, ambas traducciones tienen un buen montón de notas, en la de Crespo, a pie de página, mientras que en la de Micó se trasladan todas al fianl.
Hay que destacar que en la edición de Acantilado aparece unos muy instructivos dibujos de la forma del infierno, el purgatorio y el paraíso.
Ni que decir tiene que ambas traducciones cuentan con muy interesantes y explicativos prólogos.
Y un último detalle; Micó dedica su versión de la Comedia de Dante «a todos los traductores de Dante, condenados al mismo paraíso».
Vale.
I. Letrado
Editorial: Seix Barral Páginas: 411, 402, 442 Año: 2014 Traducción: Angel Crespo |
Editorial: Acantilado Páginas: 936 Año: 2018 Traducción: José María Micó |