El ataque a La Española es la primera novela histórica que escribe Enrique Bocanegra (Sevilla, 1973), quien ya tiene en su haber otra obra, ‘Un espía en la trinchera’, un estudio sobre la figura del espía británico Kim Philby y su actividad en España durante la Guerra Civil y con la que ganó la XXIX edición del Premio Comillas de Biografía e Historia.
Con ‘El ataque a La Española’ Enrique Bocanegra recupera un acontecimiento poco conocido sucedido en el siglo XVI en la isla de La Española, hoy un territorio dividido entre la República Dominicana y Haití, tal cual es la toma de la capital, Santo Domingo, por el pirata británico Francis Drake, que por esas cosas de los británicos y su monarquía, acabó siendo nombrado sir (y es que no hay nada como ser un delincuente para que el rey del Reino Unido te conceda un título honorífico).
Con una flota de 30 barcos y unos dos mil no pertenecientes a lo mejor de cada familia, Drake arrasó la capital de la entonces conocida como La Española. Quemó todo lo que pudo, se llevó todo lo que había de valor y mató a todos cuantos le dio la gana. El mismo y sus hombres se comportaron como lo que eran; piratas.
Esta historia está narrada por un personaje anónimo, del que sólo sabemos que era nieto del primer cronista de Indias, Gonzalo Fernández de Oviedo, y que por cuestiones de salud era un hombre más bien débil y con poco arrojo, aunque, ciertamente, no desfalleció cuando tuvo que mantenerse firme.
Enrique Bocanegra ha escrito una novela ligera, fácil de leer, estructurada en breves capítulos que casi corresponden con cada día de la ocupación británico-pirata de la ciudad. Ese anónimo protagonista, que lo pierde todo, realiza lo que su abuelo hizo en su momento; ser un cronista que da cuenta de unos hechos.
Se puede y se debe escribir novela histórica por muchos motivos, pero el de recuperar del olvido hechos como este que hace Enrique Bocanegra, el del arrase de lo que fue el primer asentamiento español en América, es uno de los más loables.
Como suele ser norma en este tipo de relatos los personajes de ficción se mezclan con los reales, como por ejemplo Simón Bolivar, hombre del que acabaría descendiendo el militar que proclamó la independencia de Venezuela un par de siglo después.
A Enrique Bocanegra, que ejerce de periodista y gestor cultural, es director de la Fundación Natal de Velázquez, dedicada a preservar el edificio del siglo XVI donde nació el autor de Las meninas hay que agradecerle que haya escrito una novela directa y sucinta, y que no nos haya endilgado uno de esos inútiles tochos de quinientas páginas que tanto daño hacen a la novela histórica.
Vale.
Editorial: Edhasa Páginas: 288 Año: 2024 |