Con la vibrante actuación del pianista jamaicano Monty Alexander se clausuró el 42 Festival de Jazz de Terrassa que ha recuperado las cifras prepandemia
Las primeras cifras de participación apuntan a una asistencia aproximada superior a los 40.000 espectadores.
La veteranía del certamen, adentrado en su quinta década, ha garantizado una programación en la que la actualidad dialogaba con el legado de un género que se reinventa constantemente para no perder el pulso de la contemporaneidad.
Hay sido 19 días y más de 60 conciertos y actividades repartidos por 22 espacios de Terrassa y comarca que será recordada por la masiva convocatoria, en el Picnic Jazz Vallparadís, después de tres ediciones de paro, con cerca de 30.000 espectadores a lo largo de las 7 horas de actividades y conciertos.
La Nova Jazz Cava se ha mantenido como el epicentro de la actividad con conciertos de club, las ‘jam session’ y las actividades pedagógicas.
Y este año despertaban ese interés representantes americanos de la escena neoyorquina como el pianista Gerald Clayton con una formación de grandes talentos, y el batería Ulysses Owens Jr. en su regreso al Festival ahora como líder de los Generation Y.
Músicos consolidados de la escena internacional como Paolo Fresu y Omar Sosa en el debut del pianista cubano en Terrassa, maestros como Chano Domínguez, que volvía al Festival para recrear el universo de Michel Petrucciani con el trompetista Flavio Boltro o la lección de jazz vocal de la cantante estadounidense Robin McKelle, han puesto de manifiesto la variada paleta estilística de las propuestas de esta edición.
La escena catalana ha brillado con luz propia en este 42 Festival de Jazz de Terrassa con varios estrenos discográficos de los proyectos pianísticos de Roger Mas, Luis Coloma y Luismi Segurado entre otros.
Catalán también ha sido este año el galardonado con el premio Jazzterrasman en la figura del saxofonista Joan Albert.
En paralelo, valores consolidados como Lluc Casares y Oriol Vallès presentaban nuevos álbumes en nuevos escenarios del festival.
La organización del 42 Festival de Jazz de Terrassa ha dado continuidad al vínculo con las escuelas de música con las que mantiene una colaboración histórica con una apuesta incuestionable por reforzar el espíritu de divulgación del jazz a través de talleres, proyectos pedagógicos, conciertos de combos y jam sessions.