El trombonista norteamericano John DuBuclet es el nuevo Premi Jazzterrasman, el galardón que otorga el Festival de Jazz de Terrassa y que le reconoce su larga trayectoria artística, vinculación al Festival y la Nova Jazz Cava, así como su faceta como docente, divulgador y director de la Big Band Jazz Terrassa (2000 – 2011).
Para celebrarlo DuBuclet encabezará una formación inédita y reunida para la ocasión con diez músicos el domingo 16 de marzo en la Nova Jazz Cava. Al respecto el trombonista ha indicado que; «el premio también es la oportunidad de volver a tocar con grandes músicos de nuevo. Además, esto me ha impulsado a escribir nueva música.»
De origen californiano pero residente en Cataluña desde hace más de cuarenta años, el maestro y compositor John DuBuclet lleva toda una vida dedicada al jazz y ha sido aglutinador de un sinfín de proyectos relacionados con el género.
Después de formar parte de Transatlàntic y fundar su propia big band, la dirección musical al frente de la Big Band Jazz Terrassa (BBJT) a lo largo de once años fue uno de los más provechosos y recordados de su trayectoria. Trombón en mano, logró la cifra de los 89 conciertos con la BBJT y dos trabajos editados, «Playing The Field» (2002) con David Allyn y «Whats Goin’on?» con Judy Niemack (2005).
Como docente, DuBuclet ha sido maestro en la ESMUC, el Musikene de Donostia y el Conservatorio Municipal de Terrassa, entre otros.
A nivel internacional, ha trabajado con figuras de renombre como Clarke Terry, Jimmy Owens Sextet, The Duke Ellington Orchestra, Louis Bellson Septet y ha colaborado con Tito Puente, Celia Cruz, Alvin Queen, Tete Montoliu, Michel Camilo o Lew Tabackin, entre otros.
El primer concierto de John DuBuclet en Terrassa fue durante la segunda edición del Festival, en 1983 en la Plaça Vella, con el cuarteto del pianista Lluís Vidal. Desde entonces, su vínculo con Jazz Terrassa ha sido constante.
El Premio Jazzterrasman es la distinción que concede el Festival Jazz Terrassa, desde el año 2003, y consiste en una pieza en bronce diseñada por la artista egarense Sílvia Segura. La escultura recuerda a la Nova Jazz Cava por su base octogonal y a las inacabables notas de saxo por los ondulantes hilos de bronce que parecen elevarse hacia el techo. Se trata de una pieza viva y musical, puesto que emite varios sonidos al ser golpeada suavemente.