Ezra Collective: Where I’m Meant To Be

‘Where I’m Meant To Be’ es el segundo larga duranción de Ezra Collective tras ‘You Can’t Steal My Joy’ (2019) y sus dos EP’s anteriores, ‘Chapter 7’ (2016) que fue su debut discográfico, y ‘Juan Pablo: The Philosophe’ (2017).

Sólo con este breve curriculum Ezra Collective se ha convertido en una de las bandas de jazz más apreciadas en el Reino Unido, un país donde el jazz más moderno está viviendo un auténtico huracán de creatividad con bandas como GoGo Penguin, Slowly Rolling Camera, Natural Lateral y Matthew Halsall, por citar sólo unos pocos nombres.

En las catorce canciones que componen este ‘Where I’m Meant To Be’ se puede encontrar un poco de todo, desde clásicos como el ‘Smile’ de Charles Chaplin (conocido en su momento como Charlot), hasta pequeños joyas de jazz moderno como ‘Live strong’, pasando por sonidos afrocaribeños y afrobeat., sin olvidar el latin jazz (ahí está ‘Siest’ con la voz de Emile Sande para corroborarlo).

La base de Ezra Collective está formada por los hermanos Toyosi Jonathan Koleoso, al bajo y Femi Koleoso a la batería (que también la toca en la banda Gorillaz), que vienen a ser los líderes de la banda, el telcista Joe Armon-Jones, el trompetista Ife Ogunjobi y James Mollison al saxo tenor, cuyo hermano Mark toca aqui la guitarra.

Y siempre rodeados de un buen número de músicos invitados, en este caso hasta veinte.
‘Where I’m Meant To Be’ es el resultado de lo que pasó después de que todo despegara como un cohete y se detuviera de golpe a causa de la pandemia del CoVid-19. Así que este álbum es una especie de reinicio de todo y para todo.

Sobre lo que han pretendido con ‘Where I’m Meant To Be’, han asegurado, muy en plan kavafisiano (ya sabes el de que «Cuando emprendas tu viaje a Itaca/pide que el camino sea largo,/lleno de aventuras, lleno de experiencias») que; «el álbum en sí es una celebración de lo que somos, y del camino en el que estamos, del viaje mismo que constituye la idea de estar vivos. No hay que celebrar el destino porque el destino nunca llega. Hay que celebrar el viaje».

Ezra Collective son el mejor resultado, hasta el momento, de la organización londinense Tomorrow’s Warriors, suerte de laboratorio de talentos inclusivo que cobija y forma a músicos negros, a mujeres y a todo aquel que no tenga el dinero suficiente para hacerlo.

Vale.