Otra nueva muestra de la sabia idea de Camjazz de maridar las músicas con buen vino. En esta ocasión es el Trio IXI formado por Régis Huby al violín, Guillaume Roy a la viola y Atsushi Sakaï en el cello los encargados de mostrarnos sus habilidades y virtuosismo en la Bodega Gravner de Oslavia, barrio de Gorizia en la región de Friuli – Venezia Giulia.
Yo siempre he mantenido la teoría de que ya era jazz las improvisaciones que para conjuntos de violas se hacían en la Inglaterra del siglo XVI, los famosos ‘Consorts’.
No todo el jazz se debe reducir a los instrumentos de viento o las percusiones.
Otra nueva muestra de la sabia idea de Camjazz de maridar las músicas con buen vino.
En esta ocasión es el Trio IXI formado por Régis Huby al violín, Guillaume Roy a la viola y Atsushi Sakaï en el chelo los encargados de mostrarnos sus habilidades y virtuosismo en la Bodega Gravner de Oslavia, barrio de Gorizia en la región de Friuli – Venezia Giulia.
Yo siempre he mantenido la teoría de que ya era jazz, en esencia, el Ars Nova del siglo XIII o las improvisaciones que para conjuntos de violas se hacían en la Inglaterra del Siglo XVI, los famosos ‘Consorts’.
Entiendo que no todo el jazz se debe reducir a los instrumentos de viento o las percusiones.
El trio IXI quiere demostrarnos con su improvisación en 2 movimientos que la música de cámara contemporánea improvisada no está lejos del jazz y lo hace con fuerza y pasión.
El violinista Régis Huby sabe que, incluso con cuatro cuerdas, puedes abarcar toda la paleta de sentimientos humanos. Guillaume Roy siendo la segunda voz sabe convertirse en el perfecto acompañante, mientras que Atsushi Sakaï lejos de ser un tercer elemento perdido hace que su chelo, quizás el instrumento de jazz más subestimado de todos, y tan cercano a la voz humana, acabe por tomar importancia y servir de contrapeso en esta aventura que encuentra en las profundidades de la bodega Gravner su perfecto eco.
Algunas de las primeras actuaciones de jazz o pre-jazz, casi siempre involucraron a músicos de cuerdas, así que no debería sorprendernos al escuchar jazz con estas formaciones y sí tendríamos que adentrarnos en sus propuestas sin prejuicios.
Estamos ante músicas nuevas, difíciles, improvisadas, tocadas con pasión en viejos instrumentos que también son patrimonio del jazz.
Este ‘Improvisation’, como los viejos vinos, hechos de buena mezcla de distintas variedades, música contemporánea y algo de improvisación jazzera, tiene su tiempo y momento para degustarlo.
Creo que es un disco podremos disfrutarlo como se merece con tranquilidad y concentración y sacarle un buen gusto.
I. Ortega
Músicos: Regis Huby (violin); Guillaume Roy (viola); Atsushi Sakai (cello) Año: 2019 Estilo: Jazz moderno |