Con ‘Gastrosofía’, que lleva por subtítulo ‘Una historia atípica de la filosofía’, escrita conjuntamente por el profesor de filosofía Eduardo Infante, al que conocemos por estos lares por su ‘No me tapes el sol’, y la escritora y traductora Cristina Macía he estado a punto de romper una regla de oro a la hora de escribir reseñas sobre libros.
En ‘Gastrosofía’ lo que Infante y Macía hacen es repasar lo que han dicho algunos de los principales pensadores acerca de la comida y la bebida.
Así que el libro está lleno de anécdotas y chascarrillos sobre lo que distintos filósofos han hecho y dicho en torno a la gastronomía.
A pesar de ser dos actividades fundamentales para el ser humano, pensar y comer, lo cierto es que la filosofía le ha prestado poca, o incluso nula, se podría decir, al hecho de comer y beber, y más genéricamente a la actividad gastronómica.
Tan poco le ha importado a los filósofos lo relacionado con la gastronomía que hay un libro que se titula ‘El banquete’ de un tal Platón (nacido Aristocles), en el que no se dice ni una palabra sobre lo que se ha comido y bebido en ese ágape, pero sí se habla mucho sobre el amor. Cosas del pensar.
Hay que señalar que Gastrosofía fue un término acuñado por Friedrich Christina Eugen Baron von Vaerts en 1851 en su libro ‘Gastrosofía o las enseñazas de las alegrías de la mesa’ con el que dominó a la ciencia de los apetitos, los gozos y los sentimientos en el que se fusionan por igual el conocimiento culinario (así como las costumbres) con el placer por la comida, la bebida, el erotismo, la música y las costumbres –según la Wikipedia.
Este recorrido histórico se inicia con Pitágoras y se acaba en el marxismo, y en medio están Descartes, Kant, Hume y otros cuantos. El libro acaba con una coda sobre las mujeres –si hubiesen sido anglos también hubiesen tenido que hacer otro sobre los negros, los latinos y todas las minorías que se nos ocurran.
Pero como aquí también hay que darle cancha a la gastronomía al final de cada capítulo se presenta una receta de lo que comían aquellos señores y si no se conocen los gustos culinarios del protagonista se muestra una receta con los ingredientes más comunes de la época.
Si ven este ‘‘Gastrosofía. Una historia atípica de la filosofía’ en una estantería, anaquel o repisa, pasen de él y háganse con ‘Filosofía de la cocina. Pequeña crítica de la razón culinaria’ de Francesca Rigotti.
Editorial: Rosamerón Páginas: 302 Año: 2022 |