En el año 2008 el escritor barcelonés Francisco Casavella, seudónimo de Francisco García Hortelano, se alzó con el premio Nadal gracias a su novela ‘Lo que sé de los vampiros’.
Desgraciadamente sólo once meses después de ganar este premio, que se falla el Día de Reyes el escritor fallecía de un infarto de miocardio, con lo que se truncó de raíz una de las carrera más prometedoras de la literatura española, tal y como se puede apreciar en ‘El día del Watusi’ (Anagrama).
‘Lo que sé de los vampiros’ vuelve ahora a las librerías gracias a la editorial Anagrama que la ha recuperado para su catálogo.
A través de esta novela Francisco Casavella narra las aventuras de Martín de Viloalle, un segundón de la nobleza rural gallega, novicio destinado a la iglesia, que decide acompañar a los jesuitas cuando el rey Carlos III decidió expulsar de España a esa orden eclesial en el año 1767.
Esta salida del Reino de España es lo que le va a permitir a Martín de Viloalle vivir una serie de aventuras a través de la Europa Central del siglo XVIII, que lo conducirán a la católica Roma, los estados alemanes, el reino de Dinamarca o el París revolucionario hasta que se embarca a América, y que le van a permitir conocer a personajes como Voltaire, Federico de Prusia, Mirabeau o Madame de Pompadour.
Este conocimiento de las más diversas realidades políticas y sociales de esa época le permite a Francisco Casavella coger en la novela asuntos tan dispares como la política prusiana centroeuropea o la efervescencia de las logias masónicas durante este período, y le van a servir igualmente para desarrollar largas, y a veces muy sesudas, reflexiones filosóficas, que, reconozcámoslo, no son del agrado de muchos lectores (hacen pensar, estar o no de acuerdo con el autor, y eso puede der muy amargo).
Lo de los vampiros del título se explica por la ‘Ley del Vampiro’: «El hombre se enmascara para no avergonzarse del mismo azar de ser hombre, de su mínima importancia, de que sólo es deudor de la nada. Por ello se traiciona a sí mismo. Bebe la sangre de los antiguos, no para alimentarse, sino para reafirmarse y reconfortarse en su idea de hombre según convenga. Y esa conveniencia hace que el hombre se vuelva vampiro. Y si el hombre no sabe a ciencia cierta de su pasado, si lo ha corrompido engañándose, ¿cómo aprenderá de sus lecciones?, ¿cómo razonará su presente?, ¿cómo aventurará su futuro? […] seguirá perdido en el Tiempo y en el Espacio[…]. Hombres con sus vampiros. Lo imprevisto, inevitable”.
‘Lo que sé de los vampiros’ fue acogida en su momento con una notable división de opiniones, que iban desde calificarla como muy buena a descalificarla como poco más que una basura a la que le sobraban páginas por un tubo.
Vale.
Editorial: Anagrama Páginas: 547 Año: 2024 |