Pocas dudas hay que Haruki Murakami (Kioto, 1949) es uno de los mejores escritores japoneses de su generación y uno de los pocos que ha logrado romper esa barrera invisible que parece atenazar a los escritores nipones.
De Haruki Murakami se saben dos cosas. Una, que es el eterno aspirante al premio nobel de literatura (aunque vista la lista de los premiados no sé yo si merece la pena estar en ese club; ¿hay alguien que lea a Echegaray o a Pearl S. Buck, por citar sólo a dos que han ganado ese premio?).
Dos, que es un gran aficionado al jazz. Es sabido que el escritor escritor japonés regentó durante años, en la década de los 70, un club de jazz llamado (en honor a su querido gato) Peter Cat; y que a través de las páginas de muchas de sus novelas se cuelan numerosas referencias al jazz, desde la afamada «Tokio Blues», pasando por «1Q84» hasta «La ciudad y los muros inciertos».
Ahora aparece por primera en español «Retratos de jazz», un libro publicado originalmente en 1997 y actualizado en 2001, que nació de la colaboración con el ilustrador Makoto Wada (Osaka, 1936-Tokio, 2019).
Se trata de un libro compuesto por cincuenta y cinco perfiles de jazzman, acompañados de una ilustración de Wada y de un comentario sobre un álbum de cada artista, extraído de la amplio colección de Murakami.
A mi entender los textos de Murakami , con hallazgos y reflexiones muy interesantes (lee la de Julian Cannonball Adderley), están por encima de las imágenes, acaso demasiado pop por lo planas.
En la selección están algunos de los músicos del gran panteón jazzístico, desde Duke Ellington, Miles Davis, West Montgomery, Bill Evans hasta Ella Fitzgerald, Billie Holiday, Charlie Parker o Art Pepper. Sorprende algunas presencias, como las del cornetista Bix Beiderbecke o el trombonista Jack Teagarden, y la ausencia de John Coltrane.
Lo que es un pena es que durante la revisión del libro en 2001 no se hayan incluido figuras más modernas (Pat Metheny, Keith Jarrett, Wayne Shorter, Dee Dee Bridgewater, por citar sólo algunas) y se hayan retirado otras (Eddie Condon, Jackie y Roy, e incluso Frank Sinatra). Pero esto va de locas pasiones.
En todo caso, si te gustan el jazz y la literatura, este es un libro que debes tener en tu biblioteca, aunque sea en plan tsundoku.
Vale.
Editorial: Tusquets Editores Páginas: 248 Año: 2025 Traducción: Juan Francisco González Sánchez |