El novelista británico John le Carré (nacido David John Moore Cornwell) es, sin duda, el escritor de relatos de espías más famoso del siglo XX desde que en 1963 publicó ‘El espía que surgió del frío’.
John le Carré falleció en diciembre de 2020 y enrtre los muchos escritos que dejó se encontraba ‘Proyecto Silverview’ (Planeta), una novela escrita en el año 2014 y que, por motivos que ahora no vienen al caso, no publicó en su momento.
Ha sido su hijo Nick Cornwell, al cargo ahora del legado de su padre, el que se ha encargado de dar a luz este relato que, como alguien ha escrito en algún lado, es un réquiem por un mundo acabado.
Ese mundo acabado es, claro, el de los espías, al menos tal y como él lo había descrito hasta entonces, pues en sus obras siempre quedaba alguien íntegro –no hay que olvidar que John le Carré se dedicó durante una parte de su vida al ejercicio de esa inusual (y un tanto psicopática) profesión.
Pero ya no es el caso.
Los espías de este relato han perdido la fe en su país y en los servicios de inteligencia; y el libro presenta una pelea, habitual en los libros del autor de ‘La casa Rusia’, entre la lealtad a los principios, a los amigos y amores que lo han dado todo, frente a la lealtad a la burocracia y a las órdenes dictadas por la conveniencia política y los intereses inconfesables.
Todo comienza cuando un veterano caballero inglés (Edward Avon) calado con un sombrero Homburge se deja caer por la nueva librería de un pueblo, abierta por Julian, un joven que ha dejado un excelente trabajo en la City londidense, y que entabla amistad con este toricantano de los libro hasta el punto de sugerirle una comunidad en torno a los clásicos de la literatura.
Pero nada es lo que parece y ese hombre de más de setenta años acaba utilizando al bueno de Julian para sus propios asuntos.
Y alrededor de estos dos protagonistas se mueven personajes como Deborah (a la que John Le Carré le dedica unas estupendas páginas a cuenta de su fallecimiento); Proctor, un espía frío y funcionarial, o Lily, la hija de Edward que acabará enrollándose con Julian.
Quienes conocen bien la obra de John Le Carré, no como este que pergeña estas líneas, dicen de este ‘Proyecto Silverview’ es «completa, reflexiva, corta como sus primeras obras, contenida, centrada en la hipocresía británica y que es la perfecta destilación de su escritura».
Y yo no les voy a llevar la contraria porque, sí, es una novela que se lee con agrado y satisfacción.
Vale.
I. Letrado
Editorial: Planeta Páginas: 297 Año: 2022 Traducción: Ramón Buenaventura |