El catedrático de ética en la Universidad de Barcelona Norbert Bilbeny acaba de publica ‘Moral Barroca’, donde establece una serie de concomitancias entre los comportamientos individuales y sociales de los siglo XVI y XVII y el actual siglo XXI.
Aunque el libro se titula como se titula si se hubiese llamado ‘Moral Barroca Española’ estaría más en consonancia con lo que se puede leer, pues Bilbeny analiza en exclusiva la moral que existía en España y no en el resto de Europa. Igual era la misma, pero, no sé, me temo que habría alguna diferencia entre la moral católica española y la moral protestante danesa o alemana.
En este sentido, en el de dar cuenta de la moral en España durante los reinados de Felipe II, Felipe III, Felipe IV y Carlos II, el subtítulo obra cobra más sentido; ‘Pasado y presente de una gran soledad’.
Norbert Bilbeny ha devidido su libro en dos grandes apartados. En el primero se dedica a desentrañar la moral del barroco español poniendo el énfasis en la idea de teatralidad que recorre toda esa época y dedicando una especial atención a las figuras de Francisco de Quevedo, Calderón de la Barca y su ¿La vida es sueño’, y Baltasar Gracián.
Le segunda parte la dedica a dar cuenta de una serie de características que, a su juicio, se manifiestan tanto en el Barroco español como en la actualidad, tales como el individualismo, la soledad, la ansiedad, el miedo o la nada.
Si otros autores, verbigracia Gregorio Luri, se dedican a dar cuenta el aspecto luminosos del barroco español, esté claro que Norbert Bilbeny apuesta por incidir en eso que un filósofo barroco llamaba ‘pasiones negativas’. El filósofo catalán, aunque acaba reconociendo que en España se hicieron cosas interesantes, tienen a estar del lado más leyendanegrista, reiterando más los aspectos negativos existentes en la sociedad española de aquella época.
Es una lástima que en estos paralelismos que traza Norbert Bilbeny entre el siglo XVI y el XXI no se haya detenido en los de la persecución inquisitorial a la que se someten las ideas que se salen del canon marcado por el poder, ya sea este político, cultural, académico, social o económico.
Pero igual todo en esta vida, ya en el Barroco ya en la Postmodernidad (o lo que sea que estemos viviendo aquí y ahora) todo se resuma en lo que le dijo Felipe II a su hijo poco antes de morir: «En qué para todo».
Pero es (casi) seguro que todo lo escrito hasta aquí es un error.
Editorial: Anagrama Páginas: 264 Año: 2022 |