La escritora y periodista francesa Sophie Coignard ha visto publicada en español La tiranía de la mediocridad un libro necesario y que bien podría calificarse de combate. El subtítulo en español es elocuente y clarificador; ‘Por qué debemos salvar el mérito’.
Y es que desde posiciones se supone que progresistas se viene orquestando una guerra contra el mérito, digna de mejor causa (verbigracia, acabar con la pobreza o mejorar el nivel de la enseñanza). Pero habida cuenta de quienes están en ese lado de la política, auténticos inútiles que han llegado más por genuflexión que por mérito, no es de extrañar que se piense como se piensa. Y ese odio al individuo tomado de uno en uno es para hacérselo mirar.
Si no lo es se parece mucho, con su libro Sophie Coignard ataca las posiciones filosóficas, si es que pueden llamarse filosóficas y no simplemente ideológicas, de Michel Sandel que en el año 2020 editó ‘La tiranía del mérito’,un libro muy publicitado y que alcanzó mucho éxito. Hay que destacar que Sandel, declarado enemigo del mérito como forma de progreso social, es un hijo justamente de ese sistema que detesta. Algunos llamarían cinismo a este comportamiento del insigne filósofo gringo.
Pero no sólo critica al filósofo norteamericano, también lo hace con no pocos pretendidos intelectuales franceses. Y Coignard no se anda con medias tintas y afirma de todos ellos que muerden la mano que les dio de comer.
La defensa de la meritocracia que hace esta periodista de Le Point, donde ejerce como editorialista, se basa en las ideas surgidas de la Revolución Francesa, y busca sus antecesores en hombres como Condorcet, firme defensor de valorar el mérito.
Si hubiese que ponerle un ‘pero’ a este ineludible libro es que es muy francés. Quiero decir, toda la crítica y toda la argumentación en favor del mérito y en contra de la mediocridad se basa en casos franceses y no en casos más generales. Pero puede pensarse que sí, que de lo particular a lo universal, y que cambiando los nombres también sirve para el caso español.
Sin duda la meritocracia tiene defectos, pero a esta manera de promocionar a los individuos tomados de uno en uno, cabe decir aquello de Winston Churchill sobre la democracia, que de todos los sistemas políticos es el menos malo.
Vale.
Editorial: Deusto Páginas: 224 Año: 2024 Traducción: Nuria Viver |